Opinión - 17/4/13 - 10:22 PM

Venganza estadounidense

Ayer gráfico

Redacción

El 18 de abril de 1942, desde el océano Pacífico, despegan bombarderos B-25 de portaaviones estadounidenses para realizar el llamado ataque “Doolittle” sobre Tokio, como venganza por el bombardeo sorpresa de Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941. El ataque no causa grandes daños a los japoneses y se salda con tres tripulantes muertos, 8 capturados (tres serán fusilados y uno morirá en prisión), más 16 aviones derribados. Se cumple el principal objetivo de la misión, que no es otro que causar daño psicológico a la población japonesa y levantar la moral de estadounidenses y aliados.