Zombies políticos
Faltando menos de dos años para las elecciones del 2019, empiezan a surgir figuras y figurones que tradicionalmente se la pasan ocultos y que abruptamente emergen al escenario nacional con supuestas fórmulas salvadoras.
La ciudadanía debe de estar alerta y no caer en este juego de divisionismo, que impulsan los poderes fácticos del país, que utilizan la vieja fórmula de abanicar candidaturas, supuestamente “independientes”, pero que en la práctica, no representan más que una variante del continuismo político.
Ante la innegable popularidad del expresidente Ricardo Martinelli, quien desde Estados Unidos, sigue teniendo un caudal político importante, el “establishment” busca desesperadamente una figura que sirva de mascarón de proa a sus intereses económicos.
Es innegable que Martinelli arrastra votos y que amplios sectores ciudadanos seguirán al candidato por el cual se incline el expresidente.
Como decimos en buen panameño, el varelismo y su sostén político están “quemados”, ningún elector en su sano juicio votará en el 2019 por nada que huela a Varela o a su desacreditado partido.
Igual suerte parece que correrá el colectivo que quiso ser oposición, pero sus dirigentes lo uncieron al carro del oficialismo en un maridaje escandaloso, en aras de una gobernabilidad mal entendida.
Por ello: ¡Ojo, pueblo panameño!, saldrán zombies, momias, fantasmas, vampiros, hombres lobos y otros fenómenos de la ultratumba política panameña, no nos dejemos engañar por gente que es ambivalente en su discurso y praxis política.