Detienen por abuso a padre de niños rescatados en selva de Colombia

Las autoridades colombianas capturaaron a  Manuel Ranoque, padre biológico de dos de los niños Mucutuy y padrastro de los otros dos menores, quienes estuvieron perdidos durante más de un mes en la selva del Guaviare tras un siniestro aéreo. La captura se ha efectuado debido a presuntos abusos y tocamientos a los menores, según fuentes oficiales.

La noticia de la captura fue confirmada por el CTI de la Fiscalía General de la Nación, después de que los niños proporcionaran declaraciones cruciales en el marco del proceso de restablecimiento de derechos liderado por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Según información recopilada por diferentes medios de comunicación, estas declaraciones habrían sido un factor determinante para la detención de Ranoque.

Los abuelos de los niños, Narciso Mucutuy y Fátima Valencia, habían previamente denunciado los presuntos abusos, alegando que Ranoque habría intentado abusar sexualmente de la mayor de los hermanos, Lesly, y que además había maltratado en múltiples ocasiones a Magdalena Mucutuy, la madre de los niños.

Manuel Ranoque, en julio pasado, presentó una solicitud de conciliación extrajudicial contra la empresa Avianline Charter's SAS, propietaria de la avioneta en la que viajaban los niños y su madre al momento del siniestro.

En su petición, Ranoque buscaba ser indemnizado por daños materiales e inmateriales. Según cálculos presentados en la solicitud, la indemnización incluía un lucro cesante de $570.000.000 millones, correspondiente al salario de la madre al momento del trágico incidente, y un daño emergente de $12.500.000 millones, destinado a cubrir los costos de búsqueda de los niños en la selva.

La custodia de los hermanos Mucutuy está actualmente a cargo del ICBF desde su alta médica en julio. La entidad está investigando las acusaciones contra Ranoque y el contexto familiar de los niños para tomar una decisión sobre su futura custodia.

Voces adicionales en la comunidad, entre ellas la del líder indígena Carlos Andrés Aguirre, han respaldado las acusaciones de maltrato y abuso sexual, destacando la preocupación por el bienestar de los niños. Aguirre declaró: "Para nosotros como pueblo indígena, él debería de estar pagando la condena en una cárcel, él cometió un delito dentro del resguardo… Nos mintió al país completo, para nosotros como pueblos indígenas que sabemos bien el recorrido del padre no sería bueno darle la custodia al padre, por los delitos que ha cometido dentro del resguardo".

La comunidad, compuesta por alrededor de 150 personas, ha afirmado que la familia conformada por Manuel y Magdalena ha enfrentado una historia de maltrato y abusos, añadiendo un sombrío trasfondo a este preocupante caso. Las autoridades continúan investigando el asunto mientras el país sigue de cerca los desarrollos de esta impactante historia.