Ombudsman: crisis de migrantes puede agravarse con la llegada de Trump
El defensor del pueblo de Panamá, Eduardo Leblanc, apeló ayer a la necesidad de que los derechos humanos se conviertan en el eje central de desarrollo en el país, que, dijo, enfrenta deficiencias en los servicios básicos así como la crisis humanitaria de los migrantes que cruzan la selva del Darién hacia EEUU y que pudiera agravarse ante potenciales cambios migratorios del próximo presidente Donald Trump.
Tras la presentación del informe 2024 de la situación de los Derechos Humanos en Panamá. Leblanc dijo que en el país "persisten carencias significativas" en servicios esenciales como salud, educación, agua potable y vivienda, por lo que urgió a "trabajar y sentarnos a dictar políticas envasadas en derechos humanos".
Leblanc advirtió, por otra parte, sobre una posible crisis migratoria para 2025, influenciada por la situación política en Venezuela y cambios en la política migratoria de EEUU con la vuelta de Donald Trump a la presidencia de EEUU.
"Hemos tenido conversaciones con representantes de María Corina Machado en Washington y ellos indican que de no cambiar el Gobierno en Venezuela, puede haber más de un millón de venezolanos que abandonen el país, lo cual va a impactar a la población de países cercanos y sin lugar a duda impactará en gran medida en alguna forma a Panamá", señaló el ombudsman panameño.
El Defensor alertó también acerca de que con Trump puede haber un cambio de política migratoria, y dijo que esto lo ha llevado a tener "conversaciones con algunas instituciones de derechos humanos, donde estamos previendo la posibilidad de que haya una un retorno (migratorio) de norte a sur y cómo se puede manejar esa situación de la mejor manera".
En el tema de los embarazos de adolescentes, precisó que hay "4,000 adolescentes entre 15 y 17 años que han sido madres", perpetuándose así, señaló, el círculo de pobreza, especialmente en las comarcas Ngäbe Buglé. Asimismo, las niñas migrantes también enfrentan altos riesgos de violencia sexual, dijo.
En cuanto a la violencia de género y los feminicidios, consideró que son "preocupaciones graves", por lo cual instó a trabajar desde la niñez en "la masculinidad positiva" para transformar las normas culturales que perpetúan la violencia de género.