Nacional - 29/12/25 - 08:58 AM

China exige sanciones y restauración del Parque China-Panamá tras demolición

La demolición ha generado preocupación en el Gobierno Central y rechazo en distintos sectores sociales del paí

 

Por: Redacción / Crítica -

La Embajada de la República Popular China en Panamá exigió una investigación exhaustiva, sanciones para los responsables y la restauración del Parque China-Panamá y del Monumento al 150º Aniversario de la Llegada de los Chinos a Panamá en su ubicación original, tras la demolición ocurrida la noche del 27 de diciembre en el Mirador del Puente de las Américas, en el distrito de Arraiján.

En una declaración solemne, la representación diplomática manifestó su profunda consternación e indignación por una acción que, según señaló, se ejecutó sin previo aviso ni comunicación con las asociaciones chinas del país, y pese a la oposición expresa de miembros de la comunidad chino-panameña presentes en el lugar.

Para la Embajada, lo sucedido va más allá de un procedimiento administrativo. Se trata de un golpe directo a la memoria histórica y a los sentimientos de más de 300 mil chino-panameños, que forman parte del tejido social del país desde hace 171 años.

El comunicado recuerda que los primeros ciudadanos chinos llegaron a Panamá en el siglo XIX para trabajar en la construcción del Ferrocarril Interoceánico, y que muchos de ellos quedaron enterrados a lo largo del trazado del Canal. Con el paso del tiempo, la comunidad china se estableció, prosperó y contribuyó de forma decisiva al desarrollo económico, social y cultural de la nación.

En reconocimiento a ese aporte, el Estado panameño declaró en 2004 el 30 de marzo como el Día de la Etnia China. Ese mismo año se inauguró el Parque China-Panamá, financiado principalmente por la comunidad china y con apoyo del Gobierno chino, como un tributo a la historia compartida entre ambos pueblos. Para la Embajada, tanto el parque como el monumento son patrimonio nacional y no propiedad de ningún gobierno local.

El documento también revela que desde 2024 las asociaciones chinas intentaron en múltiples ocasiones dialogar con la Alcaldía de Arraiján para preservar y mejorar el parque, incluso ofreciendo financiar su renovación. Sin embargo, aseguran que no recibieron respuesta. La propia Embajada expresó formalmente su disposición a colaborar en la restauración, propuesta que tampoco fue atendida.

La demolición ha generado preocupación en el Gobierno Central y rechazo en distintos sectores sociales del país. En ese contexto, la Embajada expresó su respaldo a las declaraciones del presidente José Raúl Mulino y de varias instituciones que han cuestionado lo ocurrido.

Finalmente, la representación diplomática hizo un llamado a la comunidad china en Panamá a defender sus derechos de manera racional y conforme a la ley, reafirmando su compromiso con el respeto, la convivencia y la estabilidad social.