Nacional - 02/6/25 - 08:29 PM

Gobierno: Hay manipulación masiva

“Nos comentan cosas que ni siquiera están en el texto de la ley. ¡Los tienen engañados!”, afirmó. También reveló que los enviados de la CSS no fueron ni escuchados.

 

Por: Redacción / Crítica -


¡Candela en Bocas del Toro! El Gobierno se fue de frente contra los dirigentes que mantienen bloqueadas las vías en protesta por la polémica Ley 462, que reforma la Caja de Seguro Social (CSS). 

Los ministros dejaron claro que “no hay voluntad de diálogo” por parte de ciertos sectores, y que todo apunta a una manipulación masiva.

Fue el ministro de la Presidencia, Juan Carlos Orillac, quien salió con los tapones de punta. Mostró en pantalla videos donde se ve a Diógenes Espinoza, cabecilla del Suntracs, lanzando amenazas de tomarse las instituciones públicas en Bocas. “Ese no es el camino, ni mucho menos una forma responsable de protestar”, dijo molesto.

Según Orillac, el Gobierno intentó acercarse a los manifestantes, incluso enviando comisiones para escuchar sus inquietudes. 

“Nos comentan cosas que ni siquiera están en el texto de la ley. ¡Los tienen engañados!”, afirmó. También reveló que los enviados de la CSS no fueron ni escuchados.

La ministra de Trabajo, Jackeline Muñoz, también metió su cucharón. Lamentó la “cerrazón total” del sector bananero, que según ella, ha llevado al cierre de operaciones de Chiquita Panamá. “¡Están generando más desempleo que soluciones!”, expresó con tono fuerte. Agregó que la economía de la región está colgando de un hilo, y que los bloqueos no permiten que otros trabajadores puedan ganarse el pan.

“Nosotros vamos a vivir en las calles hasta que no se apruebe la ley”, fue la respuesta de los dirigentes, según contó la ministra.

Además, recordó que los hombres del sector se jubilan a los 56 y las mujeres a los 54, gracias a beneficios especiales, pero ahora ni siquiera pueden seguir trabajando por los cierres.

Los ministros alertaron sobre un inminente colapso sanitario y económico si las protestas continúan. “No se puede permitir que un grupo con privilegios mantenga paralizado a todo un pueblo”, concluyó Orillac.