Quejas, empujones, molestias y coladera en Naviferia de Chepo
Hubo quienes llegaron desde el día anterior. Unos desde las 2:00 p.m., otros en la madrugada.
Desde antes de las 5:00 a.m., cuando las cajas comenzaron a moverse —dos horas antes del horario oficial—, la gente ya estaba lista para agarrar su caja navideña y su jamón, porque en tiempos duros, conseguir alimentos a buen precio vale la desvelada.
Hubo quienes llegaron desde el día anterior. Unos desde las 2:00 p.m., otros en la madrugada fría, con termos, sillas y paciencia estirada, todo para no quedarse sin ese combo que ayuda a que diciembre pese menos en el bolsillo.
En cuanto la venta abrió paso, el movimiento fue rápido. Por 15 balboas la gente salió con arroz, aceite, jamón y algo de tranquilidad para la mesa.
Pero no todo fue armonía. Hubo quejas, empujones, molestia. Gente que se colaba, discusiones por el orden de la fila y un llamado fuerte a que el personal y las autoridades metan más control la próxima vez.
“Estamos horas aquí, mínimo que respeten la fila”, lanzó un comprador molesto, sin soltar su ticket.
Aun así, la mayoría coincide: quien aguantó y compró, se fue con algo para la casa.