Salario mínimo: Conato sigue en la mesa, Conusi se baja y el reloj corre
Conato está sentado, calculadora en mano, apostando a un aumento del 7% para grandes empresas y 6% para pequeñas.
En el Ministerio de Trabajo, la mesa del salario mínimo amaneció tensa y sin una voz unificada del lado de los trabajadores.
Ayer hubo quiebre, hoy hay sillas vacías y un reloj que aprieta. Ya es el último día de negociación y no hay humo blanco.
Conato está sentado, calculadora en mano, apostando a un aumento del 7% para grandes empresas y 6% para pequeñas.
Del otro lado, Conusi no regresó a la mesa, después de defender un salario unificado de 1,956 dólares, una cifra que hubiese levantado el piso más de un 200%.
Ese choque dejó al movimiento sindical partido en dos, justo cuando más se necesitaba hablar con una sola voz.
Gustavo Herrera, representante de Conato, trató de poner orden en el ambiente: “Si no logramos un acuerdo, el Gobierno va a terminar decidiendo, y eso es lo que nadie quiere”, Para él, fijar el salario desde un despacho sería una derrota colectiva.
Recordó en una entrevista a TVN-2 que hay 59 salarios mínimos en 74 actividades, y no todo el país respira igual.
“Es irresponsable empujar aumentos que cierren empresas. Hay gente que hoy vive con 400 o 500 dólares. Tenemos que subirlos sin quebrarlos”, resumió.
La ministra Jackeline Muñoz ha servido de puente y extintor. La división entre Conato y Conusi le mete presión al diálogo, pero la mesa sigue, a puerta cerrada, buscando ese número que no deje ni a trabajadores ni a empresarios tirados al borde.
Si hoy no hay acuerdo, no habrá rodeos: el Ejecutivo tendrá que definir por decreto el nuevo salario mínimo