Un presente futurista
Una técnica que está brindando beneficios al hato ganadero panameño es la transferencia de embriones. A través de este método se utiliza el embrión de una vaca donadora particular y un toro, y se transfiere al útero de una vaca receptora (incubadora).
Básicamente las T.E. consisten en tratar las hembras donadoras con hormonas que inducen la maduración y ovulación múltiple al momento del celo; la donadora recibe servicio natural o por inseminación artificial.
Luego de la fecundación, entre los días 6 y 8, después del celo, los óvulos son colectados del útero de la donadora, aislados y luego transferidos a hembras receptoras.
Luego, mediante los anticuerpos del calostro (la primera sustancia que segregan las glándulas mamarias de cualquier mamífero) y la lactancia, logra proteger al ternero durante los primeros meses de vida, contra enfermedades particulares de cada zona, además de enseñarlo a convivir con el medio ambiente.
Hay que aclarar que todas las operaciones que se efectúan en el aparato reproductor de donadoras (inseminación y recolección de embriones) y receptoras (transferencia) son por métodos no-quirúrgicos, sin anestesia general y sin riesgos para el futuro reproductivo.
Este método busca aumentar el potencial reproductivo de animales genéticamente superiores, obteniendo un mayor número de crías de hembras seleccionadas por su potencial genético, a sus características, y registros de producción.
Además es posible disminuir el intervalo entre generaciones a 21 meses y se acelera el progreso genético para producir machos necesarios para padrear (progenitor) el ganado comercial, sin necesidad de compra.