Carta de Ana Mae

Redacción / Web
Aclaración por la Memoria de Guillermo Endara
Por respeto a los panameños y panameñas, que se merecen una contienda electoral de altura,   me permito responderle a los que se inquietan por una carta que escribió mi difunto esposo  Guillermo David Endara Galimany, en la que se refiere en duros términos a Ricardo Martinelli, hoy Presidente de la República.
Desde que evaluaba las diferentes candidaturas electorales para ofrecer mi respaldo,  me causaba risa, por decir lo menos,  como algunos seguidores acérrimos e inclusive uno de los candidatos presidenciales,   se atrevió a manifestarme que   mi respaldo a la candidatura de José Domingo Arias, me significaría hacer pública esta comunicación.
Aun cuando siempre procuraré tratar con  respeto a los actores políticos de mi país,  esta actitud la evalué muy baja y poco caballerosa, la disculpo, pero obviamente influyó un poco en mi decisión.
A quienes motivados por sus pasiones políticas o su falta de conocimiento de un acontecimiento en todas sus facetas democrático o quienes  lastimosamente por sus odios biselares que envenenan su espíritu y le impide disfrutar de un ejercicio electoral que representa la más sublime expresión Democrática  del  Pueblo  Soberano, les invito a leer el libro:
GUILLERMO ENDARA
“El legado de una democracia”
La entrevista  (página 51)
(Preguntas de la periodista Alexandra Ciniglio en negrita,  itálica es mía)
Copio textualmente:
¿Cómo describe usted  a Ricardo Martinelli?
Me pone una pregunta muy difícil.  A Ricardo lo conozco poco; yo lo conozco más que nada porque mi hermana Elsa María, quien falleció hace ya muchos años, estuvo casada con Guido Martinelli, primo hermano de Ricardito; y razones de tipo familiar y de negocios, bancos que tenía Guido, en los que tenía acciones Ricardito, yo también tenía acciones.  Ahora tengo más  realitos que cuando era Presidente, porque ese [banco] se vendió y a mí me tocó una buena tajadita, no para convertirme en un multimillonario ni nada  por el estilo.  Yo lo conozco, pero no tenemos una gran amistad;  tuvimos una peleíta una vez, pero no vale la pena recordar eso tan desagradable.
¿Fue superada?
Bastante superada, por lo menos de acuerdo con lo que conversamos una vez del tema, eso quedó superado.
Agradeceré a los que han divulgado con vehemencia  esa comunicación y  no obedecen a una conspiración propia de quienes se valen de todo para confundir, denigrar, ofender.
Si les parece justo divulguen el texto y audio de mi esposo refiriéndose a ese tema.
El verdadero ataque político  lo  viví y  compartí   19 años junto a mi esposo en momentos realmente difíciles.  Conozco  verdades que jamás expresamos y   guardamos en lo más íntimo, porque   Guillermo Endara me enseñó que lo más importante es la gente y que el pueblo merece de sus gobernantes,
“servir hasta el sacrificio”.
Ana Mae Díaz, Viuda de Endara