Guatemala: Enjuician por genocidio a Ríos Montt

El general, de 90 años y quien según los médicos está enfermo y senil, será representado por sus abogados, no habrá una condena a prisión y sólo podrán estar presentes sus defensores y la fiscalía, quienes discutirán las medidas de seguridad que se podrían ordenar de ser declarado culpable.

La fiscalía acusa a Ríos Montt de cientos de masacres contra poblaciones indígenas, específicamente en el área Ixil, al noroccidente del país, durante su presidencia de facto entre marzo de 1982 y agosto de 1983. La fiscalía sostiene que al menos 1.771 indígenas habrían muerto a manos de soldados que estaban bajo el mando de Ríos Montt.

Mientras se reanudaba el juicio el tribunal decidió expulsar a los abogados del general retirado Luis Rosales Marroquín y Jaime Hernández aduciendo que habían puesto en duda su imparcialidad y habían presentado una denuncia contra el tribunal. La abogada Linda Juárez asumió entonces la defensa.

Rosales Marroquín dijo que el tribunal no es competente para conocer del caso y que lo que pretenden es que el general retirado sea juzgado por un tribunal común y por los códigos y leyes ya extintos pero que estaban vigentes cuando sucedieron los hechos.

“El tribunal no está por encima de la ley”, agregó Hernández.

Los abogados del exdictador aseguran que su condición de salud se ha deteriorado “mucho”, que ya no tiene lucidez ni recuerdos, “camina poco y está muy enfermo”.

El proceso ha sido suspendido varias veces debido a peticiones de la defensa que argumenta que el juicio no debe realizarse pues médicos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses han declarado que Ríos Montt no está en pleno uso de sus facultades mentales ni puede tomar decisiones. Sin embargo, la Corte de Constitucionalidad ordenó que el proceso se realice a puertas cerradas.

José Mauricio Rodríguez, jefe de inteligencia durante el gobierno de Ríos Montt, está acusado por el mismo caso pero la Corte de Constitucionalidad resolvió separar los procesos. El juicio contra Rodríguez es público. La tarde del viernes, durante la audiencia de Rodríguez, el tribunal leyó el proyecto militar “Victoria 82”, unos de los planes del Ejército en los que, según la fiscalía, se habrían basado los operativos militares contrainsurgentes.

Julia Cortez, una sobreviviente de las masacres, se levantó de madrugada y viajó siete horas para ver el juicio.

“No sabía que era a puerta cerrada. Como víctimas estamos aquí y queremos saber qué pasa. Aunque no nos dejen entrar vamos a permanecer aquí”, dijo.

Ríos Montt fue juzgado y condenado a 80 años de prisión en 2013 por genocidio y Rodríguez fue absuelto. Trece días después la Corte de Constitucionalidad decidió revocar la sentencia y ordenó un nuevo juicio que comenzó en 2016 y fue suspendido hasta el viernes.