Ultimo adiós para el pastor "Pocho"

Todos recuerdan a "Pocho" como el pastor que siempre estuvo al servicio del prójimo.

Familiares, amigos y hermanos de la iglesia dan hoy el último adiós al pastor Héctor Rolando Rodríguez Mendoza, de 37 años, apodado “Pocho, quien fue asesinado por unos sicarios durante una convocatoria para el programa de Barrios Seguro. En el templo “Dios está aquí”, ubicado en Roberto Durán, en el distrito San Miguelito, el cual que era dirigido por "Pocho" se le recuerda con cariño y alaban la palabra en medio del funeral. Todos recuerdan a "Pocho" como el pastor que siempre estuvo al servicio del prójimo. Perfil del pastor “Pocho” dejó dos hijos: una de quince años y un niño de 2. Sirvió a Dios durante 16 años. Era el director de Deporte del Municipio de Panamá; también se desempeñaba en los programas “Barrios seguros” y “Techos de esperanza”. En su adolescencia, debido a su rebeldía, cometió un homicidio por el cual pagó condena. También por robo. El hecho de sangre El pasado miércoles, el siervo desayunó en la casa, como de costumbre, y luego salió a cumplir labores. En el momento en que se encontraban reunido con los pandilleros, notó la presencia de los sicarios en moto y obligó a los 49 que buscaban resocialización a ingresar a la Iglesia “Dios está aquí”, ubicada en Roberto Durán, San Miguelito. Un testigo contó que él se quedó afuera y les dijo a los criminales que dejaran la violencia. Habló de Dios. Pronunció sus últimas palabras: “La sangre de Cristo tiene poder”. Acto seguido, entraron a la iglesia (los matones), dispararon y mataron a su objetivo: Baltazar Villarreal Perea, de 26 años, alias “Junito Moño”. Le metieron cinco tiros, y a “ Pocho”, uno. En el ataque resultaron heridos; Jorge Luis Rodríguez, de 30 años, en el pie derecho; Johan Morales, de 39 años, en el pie izquierdo. Móvil Los pandilleros que se encontraban reunidos en la iglesia producto de la convocatoria que hizo el Gobierno para recibir el bono semanal de 50 dólares, estaban esperando sus cheques cuando fueron atacados. El crimen se debe a una rivalidad entre las 44 pandillas que operan en San Miguelito. “Bagdad” y “Calor, calor” encabezan la lista de enemigos que ocasionan el mayor derrame de sangre en el distrito. Error Esa coordinación (la del pago) fue fatal entre los encargados, porque no tomaron en cuenta a todos los agentes que intervienen, situación que aprovecharon los integrantes de la pandilla “Los Chacales”, para cometer los homicidios. Investigación Uno de los dos sicarios fue detenido. El mismo se encuentra en una celda en la sede de la Policía Nacional. El cómplice no ha sido capturado. Ambos formaban parte del programa “Barrios seguros”.