Excusas mexicanas
Entre las presuntas represalias de una Federación Internacional a la falta de puntería, el uniforme y el viento, los directivos y deportistas mexicanos explican o justifican sus resultados en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
"Las represalias por no regalar 15 millones de dólares ahí están", reveló en su cuenta oficial de Twitter, el ministro mexicano del deporte Alfredo Castillo tras los saltos sincronizados de trampolín en la que fallaron Jahir Ocampo y Rommel Pacheco.
Castillo se refirió así al conflicto legal con la Federación Internacional de Natación sobre el pago de cinco millones de dólares que se exigen a México como sanción por renunciar a los Mundiales de 2017 y que estuvieron a punto de dejar fuera al país de Río 2016.
Los jueces de la prueba rechazaron la petición de Pacheco-Ocampo para repetir un salto al denunciar que perdieron la concentración por unas luces que se encendieron al momento de saltar del trampolín.
El seleccionador de fútbol olímpico, Raúl Gutiérrez, dijo que la eliminación de México tras perder con Corea del Sur (1-0) se debía a la falta de contundencia y a la falta de efectividad ante la portería rival.
"Hoy no metimos la pelota y así es esto; si no la metes en momentos definitorios, no avanzas", manifestó el entrenador del equipo olímpico de fútbol.
El diario Reforma, en su sección deportiva Cancha, hizo una recopilación de las justificaciones de otros deportistas mexicanos para explicar sus resultados, con su consecuente eliminación de la justa olímpica.
"La licras (ropa) que me dieron no me quedaron bien", señaló el levantador de pesas Bredni Roque Mendoza, quien salió a competir con un uniforme con un parche en el frente y que finalizó en la quinta posición de su prueba.
El presidente de la Federación Mexicana de Levantamiento de Pesas, Rosalío Alvarado, afirmó que Roque Mendoza "no quiso ponerse el uniforme de México" al lo que el haltera respondió con "no me hacía sentir cómodo".
La arquera Aida Román explicó su eliminación en el tiro con arco por el viento que prevalecía al momento de disparar sus flechas, un inconveniente que no afrontó su rival de Taiwán.
"Me ha costado mucho trabajo el viento", aseguró Aída Román al destacar que en el sitio donde ella se entrena "no hay viento. Pero así es el tiro con arco", sostuvo.
El caso del púgil mexicano Raúl Curiel también generó muchas explicaciones después de que se divulgó que fue eliminado del boxeo de Río 2016 sin competir por no haber acudido a un control médico de rutina.
La delegación mexicana argumentó que el boxeador mexicano había presentado un cuadro de gastroenteritis que le impedía competir, aunque los medios de prensa en México revelaron que la verdadera razón es que estaba excedido de peso y no cumplió con su categoría de 64 kilogramos.