Combate contra el ruido excesivo y fiestas clandestinas
Las autoridades alcaldicias han reforzado el combate contra las fiestas clandestinas y el ruido excesivo. Las redes sociales son utilizadas como herramientas para promocionar estos eventos que terminan en quejas por parte de la comunidades o en hechos que atentan contra la seguridad. Unas 24 quejas por ruido excesivo en el Distrito de San Miguelito son atendidas mensualmente por los corregidores y jueces nocturnos que desarrollan una serie de operativos para mantener el orden y la convivencia pacífica entre los residentes. De acuerdo a las estadísticas, por mes se reportan un aproximado de 10 a 20 casos de fiestas sin permisos, que en ocasiones generan desorden público, venta de drogas entre otras conductas delictivas sostuvo Ricardo Rodríguez Jefe de los corregidores de la Alcaldía de San Miguelito. El Alcalde Gerald Cumberbatch hizo un llamado a los padres de familia para que estén al pendientes de sus hijos y de las redes sociales donde se promocionan fiestas clandestinas, al tiempo que advirtió que la Alcaldía no permitirá este tipo de situaciones que perturban la tranquilidad de los moradores. “He girado instrucciones a los corregidores y jueces nocturnos para que ponga orden en los corregimientos; recibimos a menudo quejas de las comunidades y toda fiesta o actividad que no tenga los permisos correspondientes o no cumpla con las normas establecidas será suspendida. El derecho ajeno es la paz” Señalo el Alcalde. Las autoridades de la Alcaldía de San Miguelito trabajan en conjunto con otras instituciones del estado una estrategia para realizar operativos mancomunados en diversos sectores, centros nocturnos de diversión y negocios establecidos en todo el distrito. Este sábado, 4 menores de edad y 11 adultos fueron detenidos en una residencia en el sector de Villa Lucre donde se organizaba una fiesta promocionada a través de las redes sociales; en esta actividad se decomiso licor y un arma de fuego con permiso vencido. Mientras que en Cerro Viento se suspendió otra fiesta que no contaba con autorización y se ofrecía licor, discoteca y hasta culecos.