Acribillan a goleador de futsal

Tres testigos y los videos de una cámara de seguridad son las evidencias con que cuenta el fiscal Auxiliar, Marcelino Aguilar, para resolver el homicidio del goleador

William Sala/ Crítica /

Tres testigos y los videos de una cámara de seguridad son las evidencias con que cuenta el fiscal Auxiliar, Marcelino Aguilar, para resolver el homicidio del goleador de la Selección de Futsal de Panamá, Miguel Antonio Lasso Rodríguez, de 27 años.

El representante de Panamá en el Mundial de Tailandia (2012), en el que marcó dos goles, fue asesinado de 14 tiros en la madrugada de ayer, cuando llegaba en su vehículo blanco a una discoteca ubicada en La Gran Estación, en el corregimiento de Pueblo Nuevo.

Testigos contaron que junto a la víctima iba un primo y otra persona, y estos son abordados por dos gatilleros, quienes les realizan varios disparos. El primo se lanza al piso y “Miguelito”, como de cariño lo llamaban, se desplaza varios metros pero es alcanzado por las balas. Una vez cae en el pavimento los gatilleros se acercan y lo rematan.

La víctima, quien no se metía con nadie, dejó un hijo de siete años y uno que está por nacer, dijo su hermana menor.

“Miguelito” es recordado por sus familiares como un joven alegre, quien actualmente jugaba en el F.C. Suntracs de la segunda división de la Liga Panameña de Fútbol (LPF).

Las autoridades tienen varias hipótesis sobre el homicidio. Una, que este crimen es pasional, y la otra, que el ataque era para otra persona.

“Miguelito” en su hoja de vida no tiene antecedentes penales, tampoco reportes de que fuese violento, explicó el subcomisionado Nadir González, jefe de la zona policial de Pueblo Nuevo, por eso el caso está complicado.

A pesar de la poca información que se ha obtenido hasta el momento, las autoridades reconocen que hubo un trabajo de inteligencia previo al crimen para poder matar al futbolista.

Funcionarios del Departamento de Homicidios de la Dirección de Investigación Judicial consideran que hubo comunicaciones telefónicas y seguimiento del carro.

Cerca a la escena del homicidio había ocho policías prestando servicios a una discoteca, y a pesar de esto, no lograron dar con el paradero de los involucrados.

Al menos más de 15 futbolistas han sido asesinados en los últimos 22 años. Los casos han sido algo confusos, y en la mayoría las autoridades no han dado con el paradero de los responsables.