García Márquez continúa "en un estado delicado", según su médico personal
"Se encuentra en un estado delicado, propio de su edad, de los problemas que ha sufrido últimamente y de sus patologías de base", afirmó el director de Cardiología del Instituto Nacional de Nutrición de México a esa emisora en su segunda aparición.
Bogotá
EFE
El escritor Gabriel García Márquez continúa "en un estado delicado", según su médico personal, Jorge Oseguera, quien le visitó en su casa de Ciudad de México, informaron hoy medios colombianos.
La emisora colombiana Caracol Radio indicó que Oseguera visitó el miércoles al Nobel de Literatura de 1982 en dos ocasiones, primero a las 13.00 hora local (18.00 GMT) y luego a las 19.25 de la noche (00.25 GMT del jueves).
"Se encuentra en un estado delicado, propio de su edad, de los problemas que ha sufrido últimamente y de sus patologías de base", afirmó el director de Cardiología del Instituto Nacional de Nutrición de México a esa emisora en su segunda aparición.
No obstante, reiteró que la esposa y los hijos de García Márquez han pedido prudencia sobre el estado del escritor colombiano, de 87 años de edad, así como respeto a la privacidad de la familia.
De hecho, pasadas las 21.00 hora local (02.00 GMT del jueves), llegaron y se fueron en un riguroso silencio amigos de la familia, su asistente personal, Mónica Alonso, y el relevo de las enfermeras.
Gabo, como se conoce afectuosamente al escritor, estuvo ocho días ingresado en un hospital de Ciudad de México, hasta el martes de la semana pasada, aquejado por un proceso de infección pulmonar y en las vías urinarias del que se recupera ahora en su casa.
El diario mexicano El Universal publicó el lunes, citando fuentes anónimas "confiables", que García Márquez, que en 1999 superó un cáncer linfático, sufre esta vez un proceso canceroso que le afecta al pulmón, los ganglios y el hígado.
Pero ese mismo día la esposa y los hijos del autor de "Cien años de soledad" emitieron un comunicado en el que desmintieron esa información, reconocieron que la condición del Nobel es estable pero "muy frágil" y que "existen riesgos de complicaciones" debido a su edad.