Asesinato en Veracruz

De seis balazos fue asesinado Félix Abdiel Pascual, de 30 años, por tres sujetos que no han sido detenidos por las autoridades.

El asesinato ocurrió en la barriada El Palmar, en el corregimiento costero Veracruz, del distrito Arraiján, en Panamá Oeste.

El homicidio fue reportado a las 2:45 a.m. de ayer, domingo.

Relato

Informes preliminares en la comunidad revelaron que "Felito", como era conocido por sus seres queridos y amigos más allegados, estuvo en casa de su padre en la comunidad "La esperanza", cerca al hospital de la CSS en el pueblo. Allí permaneció tomando algunos tragos como hasta alrededor de las 11:00 de la noche.

En el sector, oscuro por naturaleza, estrecho y con las casas de barrio muy pegadas las unas de las otras divididas por cercas de alambres, alegradas por el ambiente festivo con música popular, las sombras de tres sujetos fueron vistas por los vecinos, en la entrada a la vereda donde se encontraba "Felito" departiendo en familia y amistades.

Cuando la víctima se despidió y se retiró, "las sombras" también desaparecieron.

En la mañana la noticia corrió como pólvora por la comunidad: "Mataron a 'Felito'".

Las primeras investigaciones apuntan a que cuando el ciudadano se retiró del área con destino a su casa, también ubicada en el pueblo, aparentemente fue interceptado por las "sombras", quienes se encargaron de meterle los tiros que acabaron con su vida en el lugar de los hechos.

Se informó que las autoridades verifican esa versión.

Aparentemente los vecinos en El Palmar, área de la playa del lugar, cerca a Costa del Sol, en la salida del pueblo, escucharon las detonaciones de arma de fuego y realizaron el llamado a la Subestación de la Policía Nacional que se encuentra en la entrada del corregimiento costero.

Minutos después las unidades se presentaron al lugar donde se dio el reporte, específicamente en una vereda del sector El Palmar, que lleva a la playa. Allí fue ubicado el cadáver.

Se realizó un fuerte operativo, pero no se reportaron detenciones.

Los funcionarios del Instituto de Medicina Legal y Ciencia Forenses y personal de la Unidad de Homicidios de Panamá Oeste iniciaron las investigaciones.

La víctima presenta orificios de balas en la cabeza, abdomen y costado.

Alerta

Con temor y envueltos en un obligado "Código de silencio" se levantan cada día algunos ciudadanos en el corregimiento Veracruz.

El poblado ubicado más allá del puente de Las Américas dista mucho del formado por los primeros pobladores provenientes de las provincias centrales y Darién, por la década poco antes de los años 70.

La tranquilidad de "los almejeros", como eran conocidos los que se ubicaban en las cercanías de la playa, en el lado oeste del pueblo, se ha roto y hoy por hoy, los habitantes se sienten atemorizados por la presencia de "grupos" que "no se llevan bien", como relatan algunos de los fundadores de Veracruz.

Ayer, domingo, en medio del dolor en el barrio, se manifestó el temor y el silencio gritaba la verdad que no se atreven a decir abiertamente.

"No quiere hablar porque no quiere problemas", fue la frase de un familiar de la víctima.

La afirmación hacía alusión a las identidades de "las sombras" que fueron vistas poco antes del desenlace fatal por varios residentes.

En medio de la telaraña de delincuencia que se teje en los alrededores, la gente confía en que la Policía Nacional busca a los responsables del suceso. "Ellos están investigando", dijo un pariente de la víctima mientras era mirado por un vecino con incredulidad.

"Aquí (en el pueblo) se vende mucha droga. Los de allá (del bando que no se habla con el otro) mandan a comprarla. Todos aquí lo saben, pero nadie se atreve a decir nada porque no queremos problemas".

Lo cierto es que la realidad de esa comunidad es un reflejo de muchas otras en el país, donde un grupito que maneja armas impone el orden a los demás para ampararse bajo el paraguas del silencio obligado.

¿Quiénes mataron a "Felito"?