Criminales se meten por un hueco al cuarto de libanés en Paso Canoas y lo matan
Un vecino encontró a la víctima tirado en el piso, amarrado y con un golpe en la cabeza, ocasionado por un objeto contundente, dentro del apartamento que arrendaba, el cual se ubica muy cerca al almacén Zona Libre Mall donde laboraba.
El Organismo de Investigación Judicial de Costa Rica (OIJ), le sigue la pista a dos sujetos, presuntos responsables del asesinato de un ciudadano libanés, de aproximadamente 85 años, ocurrido anoche, presuntamente para robarle, en el sector de Paso Canoas, en el conocido búnker de Aguacero, cerca a la línea fronteriza con Panamá.
Se conoció que un vecino encontró a la víctima tirado en el piso, amarrado y con un golpe en la cabeza, ocasionado por un objeto contundente, dentro del apartamento que arrendaba, el cual se ubica muy cerca al almacén Zona Libre Mall donde laboraba.
Todo indica que el libanés, a quien se le conocía como "Manuel el árabe", fue víctima de robo, ya que su humilde habitación estaba desordenada, había ropa y documentos tirados en el piso, mientras que él fue encontrado boca abajo a un lado de la cama, con los bolsillos de su pantalón hacia afuera, prueba de que se los revisaron, tal vez en busca de dinero.
Al parecer la víctima a tenía pocos minutos de haber llegado a su apartamento, ya que al momento de darse el hecho se mantenía con vestimenta de calle.
Hasta ahora se desconoce qué fue lo que se llevaron los delincuentes, mientras las autoridades mantienen la investigación de este homicidio.
Algunos residentes del sector indicaron que Manuel era un hombre muy callado, por su edad avanzada poco conversaba, se la pasaba todo el día en el almacén y solo llegaba a este humilde apartamento a descansar. Aseguran que sospechan que este hecho de sangre está relacionado con robo, ya que no tenía enemigos que quisieran hacerle daño.
Aseguran que el área donde se dio el hecho de sangre es muy frecuentada por personas del mal vivir, debido a la venta y consumo de drogas.
La OIJ de Ciudad Neily y la fuerza pública de Costa Rica, mantienen coordinaciones con el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), de Panamá, para dar con los responsables de este homicidio.
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