CCIAP: ‘acercamiento al Mercosur significa jugar en otra liga’

La Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (CCIAP) resaltó en su mensaje dominical que, para Panamá, el acercamiento al Mercosur, un bloque que representa un mercado de más de 270 millones de habitantes, “significa jugar en otra liga”.

“Es la oportunidad de exportar más y mejor nuestros productos, y al mismo tiempo consolidarnos como el hub logístico natural de la región, de sur a norte y de norte a sur. Queremos que lo nuestro llegue más lejos y que lo que pase por Panamá se transforme, se potencie y salga al mundo con valor agregado hecho en Panamá. No se trata de escoger: se trata de sumar, de crecer, de ampliar horizontes y de ganar en todos los frentes”, señala el gremio.

Ayer, la CCIAP confirmó que un grupo de empresarios de ese gremio acompañará al presidente de la República, José Raúl Mulino, en la misión oficial a Brasil el próximo 28 de agosto, con el propósito de ayudar al Gobierno a impulsar en ese mercado las ventajas de Panamá.

El gremio indicó que sabe que hay ciertos sectores, como el agropecuario, que tienen dudas sobre el MERCOSUR, pero al que envían un mensaje de optimismo porque “no hay malos tratos, lo que hay son tratos mal negociados”.

“Y la única forma de asegurar buenas negociaciones es participando activamente, estando en la mesa y defendiendo lo nuestro. Cada país protege lo suyo; nosotros también debemos hacerlo. Y ahí estaremos, garantizando que los rubros más sensibles de nuestra economía reciban la protección que merecen”, indica el comunicado del gremio.

Además, la Cámara destacó que esta misión abrirá espacio para algo clave: un acercamiento con los propietarios de Chiquita, con el objetivo de impulsar su regreso a Panamá. “Una señal de que el país vuelve a ser atractivo para la inversión y la producción”.

Para la CCIAP, hoy Panamá no puede conformarse con mirar los toros desde la barrera. “Nos toca ser protagonistas. Definitivamente que el futuro es retador, pero las oportunidades nos llaman con más fuerza. Y Panamá está listo para responder”.

“El mensaje es claro: el mundo empieza a recuperar la confianza en Panamá. Y esa confianza debe transformarse en lo que más necesitan las familias panameñas: empleos y bienestar”.